Otorrinolaringólogos del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe ofrecen pautas para mejorar la salud de nuestra voz

El servicio de Otorrinolaringología del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe ha realizado un estudio de las principales enfermedades benignas y malignas de la laringe que afectan principalmente a las funciones de deglución y fonación.

Las disfonías o trastornos crónicos de la voz se dividen en dos grandes tipos: las disfonías funcionales, por abuso vocal o hipotiroidismo; y las orgánico-funcionales, donde destacan los nódulos, pólipos y edema de Reinke.

Los nódulos suponen del 17 al 24% de los casos de disfonía tratándose de la patología benigna más frecuente de las cuerdas vocales. Son más frecuentes en mujeres de edad media y en niños varones. Suelen ser bilaterales y se producen por abuso vocal. El tratamiento inicial recomendado es logopédico. Se reserva la cirugía para casos de fracaso del tratamiento o para casos de gran tamaño o fibrosis de los mismos.

Los pólipos vocales son más frecuentes en varones, suelen ser unilaterales y también se producen por abuso vocal. En este caso, el tratamiento es mixto: cirugía y posteriormente logopedia. Por último, el edema de Reinke es más frecuente en mujeres, se produce por la acción conjunta del abuso vocal y el tabaco. El tratamiento consiste en suprimir los factores causales (dejar el tabaco, logopedia) y cirugía.

En verano se agudizan algunos de los factores de riesgo más comunes asociados a la afonía o disfonía: falta de una correcta hidratación, exposición a cambios bruscos de temperatura o abuso en la ingesta de bebidas y alimentos fríos.

Es por este motivo, que los otorrinolaringólogos del centro recomiendan una serie de medidas de prevención básicas: evitar hablar con ruido ambiente; limitar el tiempo de uso de la voz; utilizar bien los recursos vocales; evitar el consumo de tabaco (principal causa de tumores malignos de la laringe); mantener una buena hidratación evitando el consumo de bebidas excesivamente frías o muy calientes; evitar los ambientes muy secos, bien sea por estar en un lugar con aire acondicionado o muy poca humedad (aviones), o bien por sequedad climática. También se deben evitar el aclarado de garganta y la tos continua. Aunque no lo parezca, la voz es muy sensible a la falta de sueño, dormir lo suficiente y evitar los gritos y las tensiones psicológicas nos pueden ayudar a mantener una buena salud laríngea.

Los especialistas del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe recuerdan que en caso de persistencia de los problemas de la voz se debe acudir a consulta para realizar un estudio pormenorizado y determinar las causas. En general mantener unos buenos hábitos saludables facilita una mayor resistencia al esfuerzo vocal.