Baño del paciente encamado

■ En los encamados, el aseo corporal, alivia el dolor, la rigidez articular, reduce las molestias y el prurito ocasionado por la piel seca.

■ Antes de iniciar el baño, hay que decirle a la persona lo que vamos a hacerle, ya que le estamos quitando una parte de su intimidad física y psíquica:

·   Retirar el camisón o pijama y cubrir al paciente con una toalla grande.

·   Limpiar su cuerpo por partes con una esponja sumergida en agua tibia jabonosa.

■ Para que el encamado no se enfríe cubrir el área limpia con la toalla, a continuación descubrir y limpiar otra zona.

■ Comenzar el lavado colocando al paciente boca arriba (decúbito supino) y luego boca abajo (decúbito prono), si no pudiese permanecer en esta posición colocarlo de lado (decúbito lateral).

■ Utilizar un jabón suave, enjuagar y secar sin restregar, especialmente los pliegues de las mamas, el abdomen, las ingles y el ombligo.

■ Comenzar el lavado por la cara, y seguir en este orden, cuello, extremidades superiores, abdomen, extremidades inferiores, y por último los genitales, ano y glúteos.

■ Limpiar la zona genital siempre de delante hacia atrás, para evitar infectar el aparato urinario desde la región anal.

■ Limpiar el pliegue prepucial, es una zona muy sensible a las infecciones por falta de higiene.

■ Los espacios interdigitales (pliegues entre los dedos) de las manos y de los pies deben secarse minuciosamente. Aprovechar para cortarle las uñas en línea recta.

■ Examinar la piel con especial detenimiento en las prominencias óseas, buscando zonas enrojecidas, ampollas o erosiones que puedan avisarnos de un principio de úlcera.

■ Aplicar una crema hidratante por todo el cuerpo con leves masajes circulares en especial en zonas de mayor riesgo.

 

HIGIENE DE LAS MUCOSAS EN PACIENTES ENCAMADOS

Higiene de los ojos

Lavado de los ojos con una gasa estéril humedecida en suero salino, de forma suave, efectuando pasadas desde el lagrimal hacia el ángulo externo del ojo. Cambiar de gasas para cada ojo.

Higiene de las fosas nasales

Lavar instilando unas gotas de agua con sal o con una gasa impregnada en suero salino.

 

Higiene de la boca

■ Lavado diario de la boca con un mango de cuchara envuelto por una gasa impregnada de suero o bien agua con bicarbonato.

■ Procurar llegar a todos los lugares: paladar, encías, base de la boca y lengua, etc.

■ Enjuagar adecuadamente.

■ Hidratar los labios con vaselina.

■ Proceder al lavado tras cada una de las comidas.

■ En las personas portadoras de prótesis, retirar las dentaduras y proceder a su limpieza e higiene tras cada comida. La dentadura postiza se debe retirar siempre para dormir.
 

Recuerde que dispone de más información en autocuidados en: 

www.youtube.com/user/HERIDASHSJDA
 

Vídeo
Baño del paciente encamado